Posiblemente, las labores más complicadas de ejecutar para un líder es el mantener al equipo de trabajo productivo y enfocado en sus actividades. Más aún, cuando se trata de adoptar una diversidad cultural que no comparte los principios de la cultura de trabajo tradicional.
Las personas líderes, deben aprender a desarrollar nuevas habilidades que les permitan comunicarse de mejor manera con los demás, mientras, al mismo tiempo, trabajan en entornos que resulten más amigables y sanos tanto para los trabajadores actuales como futuros.
En este sentido, una de las habilidades a las que debe prestar mayor atención es el desarrollar una competencia cultural. Misma que funcione como un instrumento que le permita integrar a nuevas personas a su equipo, que le ayude a conseguir los objetivos y metas que se han planteado, mientras se desarrolla un crecimiento profesional y personal.
Autoevaluación
Una de las características, comúnmente encontradas en gerentes jóvenes, es su incapacidad de reconocer sus propios sesgos y cómo estos afectan a las personas que los rodean. Por ello, resulta clave reconocer que, como personas y humanos, tenemos sesgos que, consientes o no, son un limitante que nos impide fortalecer nuestros lazos con los demás.
Con el fin de familiarizarse más con la diversidad cultural y desarrollar mejor su liderazgo, debe preguntarse cuáles son los eventos o situaciones que podrían desencadenas una serie de eventos desafortunados debido a sus sesgos.
Por ejemplo, en la búsqueda de un nuevo candidato para un puesto, ¿tendría un sesgo hacia las personas por su raza, escolaridad, o algunos elementos que limiten ver lo esencialmente importante ara el puesto?
Escucha activa
Las personas que lideran un equipo de trabajo con diversidad cultural, saben que cada integrante tiene su propio estilo de comunicación e interacción con los demás. Por ejemplo, habrá quienes sean más verbales, otros escritos y unos más por señas. Una vez que se ha identificado estos estilos de comunicación, se debe establecer cómo será el medio y el mensaje que les hará llegar con el que se sientan cómodos y seguros.
En este sentido, la escucha activa será un instrumento que le permita aprender y entender la forma de comunicación de cada individuo. Descubrir y ponerse en otras perspectivas que le permitan ver el problema del otro lado del prospecto y lograr, de esta forma, una manera de solucionar los obstáculos que se presenten.
La equidad dentro del equipo de trabajo
Uno de los aspectos más recurrentes por las empresas es el contratar a un grupo limitado de personas que esté representado por una minoría. El objetivo, es aparentar que la empresa ofrece equidad de oportunidades y que las empresas están comprometidas en ofrecer puestos y salarios justos para todos.
Sin embargo, en la mayoría de las ocasiones, esto es solo una ilusión. Pues las personas que son contratadas tiene poco o nulo acceso a oportunidades que les permita crecer dentro de la organización y así, acceder a más y mejores oportunidades que les ayude en su crecimiento personal y profesional.
Por ello, resulta muy importante que le líder se pregunte cuáles son las habilidades y competencias que tiene cada individuo, mapearlas y considerarlos en un momento en el que se de una oportunidad que les ayude a acceder a un mejor puesto.
Como hemos visto, formar un equipo de trabajo con diversidad cultural no es una labor sencilla. Pero tampoco es imposible de ejecutar. Su exitosa ejecución dependerá en gran medida de la disposición que los líderes tengan en adoptar este instrumento y su disposición de atraer talentos culturalmente diversos que le sumen valor a la empresa, mientras brindar oportunidades a un grupo de personas que comparten los mismos derechos y obligaciones que el resto.