Cómo es el “mundillo” del arte para comercializar tus obras

En el marco de las actividades de Jalisco Talent Land Digital, se llevó a cabo la conferencia “De la pintura de encargo al criptoarte”, impartida por el Doctor en Bellas Artes, artista plástico y youtuber de arte y cultura, Antonio García Villarán, en la cual nos platicó un poco acerca de cómo ha evolucionado la distribución del arte a lo largo de la historia hasta llegar al llamado criptoarte.

Inició su conferencia estableciendo que estamos ante un panorama fundamental para los artistas actuales, pues hoy en día ya existe un mundo de arte. Antes los únicos artistas eran los multimillonarios, o quienes tuvieran el nivel económico para mantener una carrera artística. Mencionó el ejemplo de Yoko Ono, que tiene tiempo, dinero y contactos, y que se considera en el mundo como una artista, a pesar de no tener talento.

Actualmente ya no es necesario contar con estos medios, pues el sistema ha cambiado y estamos en una sociedad que nos muestra su peor cara:

“o eres un perdedor porque no has sabido vivir de tu arte, o si triunfas en este mundillo del arte ya te has vendido”.

Dejó en claro que los artistas, aunque trabajen con toda la ilusión del mundo, pinten los cuadros más maravillosos o hagan la música más fantástica, al final están haciendo un trabajo y tienen que cobrar por ello.

Mencionó que actualmente nos encontramos ante una cultura del elogio y una supuesta oportunidad, en la que se cree que con promocionar en redes, ganar likes o exposición ya es suficiente.

Habló del arte no como un trabajo, sino como un negocio, pues un trabajo es aquel en el cual das un servicio que demandan de ti, mientras que en un negocio el artista trabaja y promociona sus propias obras.

Para Antonio, la creatividad puede ser la mejor forma de promocionar tu arte, sobre todo con las distintas plataformas y redes en las que actualmente todos nos movemos. La creatividad también es necesaria para monetizar tu trabajo.

Explicó cómo funcionaba el negocio del arte hace un tiempo, en el siglo XVI al XVIII, en el que los artistas se desempeñaban más como artesanos, y a través de contratos entre el comprador y el artista se discutían precios, elementos y plazos de tiempo, y por medio de dos tasadores se determinaba si el precio era el adecuado.

“En el mercado del arte tiene que haber un gran número de compradores y un gran número de vendedores, y por supuesto debe existir la especulación”.

Mencionó la innovación que ha traído el mundo del criptoarte para la industria artística, que está basada en los NFT (Token No Fungible), y que gestionan la autenticidad y la propiedad de una obra, lo que la hace única e irremplazable.

Sin embargo, para poder explotar al máximo el criptoarte, es necesario que los artistas tengan trayectoria, público u ofrezcan obras destacadas, sin embargo, sí democratiza bastante el proceso de venta de obras, pues dejan de existir intermediarios entre el artista y el comprador (como lo son las galerías de arte), que durante mucho tiempo conservaban la mayor ganancia de cada venta.

Antonio finalizó comentando que es necesario entender este nuevo sistema, pues gracias a ello actualmente el arte está abierto a todo el mundo y la tecnología se está convirtiendo en una excelente forma de comercialización del arte. 

Acá te dejamos la conferencia completa:

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Periodista, comunicóloga y community manager con más de 16 años de experiencia en periodismo, medios de comunicación, relaciones públicas y estrategia en comunicación.  Áreas de Desarrollo: radio, televisión, administración pública, iniciativa privada, plataformas digitales y creación de contenido digital.