Formo, es la startup alemana que produce alimentos con proteína vegetal. Recientemente anunció que aumentará la producción bioidéntica de proteínas lácteas, apoyándose de la tecnología de edición del genoma, la experiencia de BRAIN Biotech y la plataforma patentada BRAIN-Engineered Cas (BEC). Esto, con el objetivo de producir cepas de productos de queso sin animales.
La Dra. Britta Winterberg, co-fundadora y Directora Científica de Formo, dice que, al utilizar la fermentación de precisión, pueden eliminar la vaca de la cadena de suministros de productos lácteos. En consecuencia, se podrían reducir las emisiones de efecto invernadero hasta de un 91% a 97%.
Los desarrolladores de la invención
La tecnología patentada BEC, figura como una nueva herramienta en la edición del genoma. Que presenta gran potencial comercial en el desarrollo de aplicaciones que resulten idénticas a la naturaleza. Incluyendo la atención médica y el diagnóstico.
Por su parte, el Dr. Michael Krohn, Jefe de I + D d BRAIN Biotech, comenta que la fermentación de precisión es un claro ejemplo de cómo se puede conseguir una producción de proteínas idénticas a la naturaleza, pero con la diferencia de no necesitar la intervención de la proteína animal.
Mientras tanto, el Dr. Martín Langer, vicepresidente ejecutivo y jefe de desarrollo de BRAIN Biotech. Dice que la startup Formo se posiciona como su socio ideal. Basándose en los procesos ágiles en la toma de decisiones. Seguido de un enfoque sincero y con ideas claras.
Los alimentos con proteína vegetal
Formo, ha desarrollado una nueva categoría de alimentos con proteína de origen animal, así como alternativas de origen vegetal que emplean proteínas lácteas idénticas, pero con microorganismos especializados. De forma que se codifican con secuencias de ADN de proteína de leche, mientras se estimula su crecimiento celular. Todo esto, mediante un proceso de fermentación con el fin de producir proteínas para la cosecha.
De forma que, las proteínas se combinan con grasas y carbohidratos de origen vegetal y así crear la base para el proceso de elaboración del queso. En cuanto a su producto final, puede emplearse para producir gran variedad de quesos. Tal como se hace con los de origen animal.
En base a estudios del mercado, han detectado que la demanda en alimentos sostenibles y libres de animales siguen un aumento. De manera que cerca del 79% de las personas encuestadas, confesaron estar preparadas para probar los productos de queso sin animales.