El cáncer de mama es una enfermedad que consiste en una multiplicación descontrolado de las células de la mama. Del cual se desglosan diversas subcategorías. Según datos del INEGI, tan solo en 2019, por cada 100 mil mujeres de 20 años o más, se reportaron 35.24 casos nuevos.
Siendo en México, una de las principales causas de muerte. En la mayoría de los casos, por detectarse en etapas avanzadas en las que, lastimosamente, poco se puede hacer. Razón por lo que algunos científicos e investigadores alrededor del mundo se han puesto en la búsqueda de encontrar una cura a la enfermedad.
La vacuna contra el cáncer de mama
Un grupo de especialistas pertenecientes a Mayo Clinic, situada en Rochester, Minnesota, parecen haber encontrado una solución a la enfermedad en forma de vacuna. Misma que podría dar un poco de luz en diseñar la mejor ruta para terminar con la enfermedad en pacientes.
La investigación que estuvo en manos de estos entusiastas especialistas, tuvo como objetivo lograr que esta vacuna tuviera la capacidad de eliminar las células cancerígenas antes de que estas llegaran a crecer, desarrollarse en el organismo y desencadenar las desalentadoras consecuencias.
La paciente estadounidense
Lee Marker, es el nombre de la mujer estadounidense que, en compañía con los investigadores, han conseguido una hazaña historia en la medicina. Es una paciente a la que le fue detectado el cáncer de mama en etapa temprana. Por lo que fue elegida como la candidata ideal para poner a prueba la vacuna.
Dicha vacuna le fue suministrada como un tratamiento con una duración de doce semanas. Durante ese tiempo, fue monitoreada todos los días con el fin de documentar el proceso y más importante aún, medir la efectividad de la vacuna. Por lo que fue sometida a una serie de estudios que pusieran en evidencia resultados positivos en la eliminación del tumor, así como mejorías en el sistema inmune.
Aunque los resultados de la prueba fueron positivos, la paciente decidió no arriesgarse y tomo la decisión de hacerse una mastectomía doble con el fin de disminuir el riesgo de que brotara el cáncer en un futuro.
Pero lo cierto es que, tan solo haber demostrado la efectividad de la vacuna para combatir el cáncer de mama, representa un gran avance en la medicina. Y, eventualmente, una esperanza para el resto de mujeres que viven con la enfermedad y que les da un poco de esperanza.
