Un día cualquiera tomas una entrevista de trabajo, sientes que diste lo mejor de ti, que dijiste las respuestas correctas y honestas, sin duda esperas seguir avanzando en el proceso de selección.
Al día siguiente, recibes esa llamada tan ansiada, todo comienza maravillosamente diciéndote tu gran capacidad y entonces viene el PERO… ¿Cuál es esa objeción? Te dicen que eres demasiado introvertido o que tu introversión no va de acuerdo a la posición.
Palabras o frases parecidas a estas, son algunos de los prejuicios con los que los introvertidos hemos lidiado por años, sobre todo en aquellos puestos donde se cree que el único candidato ideal es el estereotipo del extrovertido.
Siendo introvertida, en mis primeras entrevistas laborales llegué a escuchar estas objeciones con frecuencia haciéndome sentir que mi personalidad estaba MAL y deseando con frecuencia que un día mágicamente fuera una nueva persona escandalosa y extrovertida.
Pero, esto no tiene porque ser así, nadie debe jamás de sentir que su personalidad esta “incorrecta” y que solo por ser diferente las puertas deben cerrarse y quedar abiertas solo para unos cuantos.
Recuerda, no temas, jamás trates de cambiar y hacerte daño mentalmente, acéptate tal cual eres y recordando que los introvertidos, como hemos platicado, tenemos habilidades que complementan a equipos de trabajo, amistades, o a las personas extrovertidas, y sobre todo, aprende, se estratégico.
Faltan muchos pasitos para que este mundo tome por igual a las personas sin importar las personalidades. Mientras tanto pongamos el ejemplo de que no hay nadie más extrovertido que un introvertido, para ello observa y pon aprueba estos tips para triunfar en el ambiente laboral:
Como diría la influencer Bárbara de Regil: SONRÍE
Existe una gran cantidad de estudios y libros sobre el poder de la sonrisa, y no es nada descabellado. Sonreír nos aumenta el ánimo y tiene cientos de efectos positivos para mente y cuerpo. Asimismo, hablando en el entorno corporativo, sonreír en una entrevista de trabajo, puede darnos una imagen a los introvertidos de accesibilidad o sociabilidad.
Así que, si lo tuyo no es estar de parlanchín, no te preocupes, solo ve practicando tu sonrisa y comentarios amables que abran la puerta a una conversación amena.
Párate como un grande
Como decían las abuelitas: párate derecho mijito. No es un secreto que una postura correcta, con la espalda recta, hombros abiertos y alzando la cabeza con dignidad, son signos de confianza, además son símbolos de una buena impresión y hacerse notar, algo que los introvertidos a veces tratamos de evitar.
A pesar de todo, hazlo también por ti mismo, por el respeto que mereces y que sabes que representas, tú y yo sabemos que no por ser introvertidos somos los pasivos que solo van a servir como el que dice sí a las órdenes del patronazo.
Únete a la charla
El miedo a hablar en público y ser el centro de atención son situaciones impensables para la mayoría de los introvertidos, pese a todo, los expertos nos dicen que para causar una impresión que sea duradera, evitemos hablar rápido y prestar atención en el tono de voz, algunos introvertidos o tienden a hablar muy bajito o por el contrario no modular el alto de la voz.
Como introvertidos sabemos que las palabras son una parte pequeña de la comunicación pero que a la vista de otros aún es muy significativa, por eso ve practicando eligiendo frases adecuadas, escuchando conferencias e incluso tomando entrevistas de trabajo.
Actualmente la mejor manera de prepararse para una entrevista de trabajo es estando en una, así que comienza a postular en todas las vacantes que te llamen la atención y tomar practica en el arte de las palabras. Tranquilo, no tienes que sobre esforzarte o soltarte en halagos, solo mantén la cortesía con frases amables o divertidas según el contexto.
Sé un camaleón
Tú y yo sabemos que para que cambien las ideas acerca de las “desventajas de los introvertidos” aun falta un largo rato, así que si el mundo está un paso atrás, tú ve uno adelante, siendo un ser más completo. Aunque si bien hemos hablando de la aceptación y defender nuestra personalidad, también podemos ser camaleones flexibles que se adaptan a su ambiente.
Los introvertidos tenemos cientos de tesoros que podemos mostrar al mundo, saca lo mejor de ellos y demuéstralos a todos, no tenemos nada que temer o perder, que no te importen las críticas, como dicen, nadie es monedita de oro.
Afortunadamente el mundo ha ido avanzando en temas de inclusión en distintos ámbitos desde preferencias, género, hasta ideales, pero para que tengamos una sociedad tan utópica faltan algunos añitos. Entonces mientras desde nuestra calmada trinchera introvertida podemos ir rompiendo esas criticas que por años nos han perseguido, reflejando el grito de nuestra pacífica y madura voz.
